La actividad porcícola de Yucatán se ha consolidado como una de las más importantes, no solo por su destacada presencia a nivel nacional e internacional, sino porque también es la base de trabajo de miles de personas que viven en la zona rural del estado. Poco más de 7,000 familias en Yucatán dependen de manera directa de este importante sector, el cual registra un crecimiento sostenido durante los últimos años.
La de Yucatán es la cuarta más importante en México con una producción de carne de cerdo en canal de 147,064 toneladas -con datos al cierre del 2019-, volumen que no solo se distribuye en la entidad sino que también se manda de manera especial a estados como Campeche, Quintana Roo, Tabasco, Chiapas, Veracruz y Oaxaca. En la comercialización, por el estatus sanitario y la inocuidad que tiene el estado, se exportaron 72,000 toneladas, principalmente a países como Japón, Corea del Sur, Estados Unidos, Canadá, Hong Kong, Singapur, China y Chile.
No podemos dejar a un lado que esta actividad, dentro del sector primario, ocupa el primer lugar en productividad y una de sus principales fortalezas es el estatus sanitario que ofrece, lo que nos ha permitido tener un hato libre de enfermedades y ser mucho más competitivo a nivel nacional.
Hoy el sector se enfrenta a nuevos retos, pero sus fortalezas y ventajas le permitirán salir adelante.
Asociación Ganadera Local de Porcicultores de Mérida